No recuerdo abusos sufridos en la infancia. Recuerdo que siempre me llamó la atención la desnudez de ambos sexos, incluyendo toqueteos con niños y niñas.

Ya en la pre-adolescencia cayeron en mis manos revistas pornográficas, iniciando una adicción a ello. También considero a la pornografía un detonante de mi sexualidad canalizada de forma incorrecta.

Ejercía atracción sobre gays, como sucede a todo jovencito. Yo me daba cuenta en la calle o por ahí y me inquietaba eso. Como que me dejaba una sensación de halago. "Si le gusto a este gay, quiere decir que soy atractivo". Una seducción al ego y en el fondo me gustaba.
A veces me divertía povocarlos, solo para reafirmar una vez más que yo era atractivo.

Sí, tuve mi enamoramiento de niño con un compañero de la escuela primaria, pero ésto suele suceder dentro de un desarrollo normal. También lo tuve con una niña.

En la adolescencia me enamoré perdidamente de dos compañeras de escuela, en diferentes tiempos, no me correspondieron como yo hubiera querido y me lastimó mucho. Esas decepciones amorosas con las chicas dejaron el campo libre para que se desarrollaran atracciones homosexuales. Fué entonces cuando un compañero heterosexual, se hizo mi amigo pero era demasiado cariñoso. Su sincera amistad, mi soledad y sus profundas muestras de cariño terminaron por hacerme creer que yo estaba enamorado. No pasó nada, ¿qué podía pasar? lo mantuve en silencio.

A los 18 me fuí a la capital de mi país México, Distrito Federal, porque
entré a estudiar a la universidad. Había un departamento de mi familia
libre y mi madre me permitió vivir ahí.
Mala combinación: joven de buen ver (sí, era guapo, ¿que pasó hoy, por que me descompuse?), inexperto, con "buenos" valores católicos pero cero valores cristianos genuinos, fuera de la protección familiar y en la ciudad más grande del mundo. ¡ Me comió la ciudad!
Con base a eso yo recomiendo a padres no promover que sus hijos salgan a tan temprana edad del núcleo familiar con el pretexto de estudiar una carrera en otra ciudad. Creo que aunque es buena oportunidad educativa, el riesgo que corre el joven es mayor.

Ahí conocí el bar gay, la primera vez que entré me dió un ataque de risa
nerviosa por media hora, nunca había visto tantos hombres juntos y...
besándose!

Me hice asiduo, mucha diversión... pero no pasó mucho tiempo cuando encontré al doble de aquel amigo heterosexual, buen carácter, divertido y muy cariñoso. Era igual solo que no pensé que éste era... homosexual!
Tres años duró la relación intensa y dependiente. Cuanto tiempo perdí,
incluso no terminé mi carrera en la universidad. Fué cuando enfrenté a mi familia tratando de defender "mi vida" .

¿Por que al mismo tiempo que me la pasaba bien con ese chico, tenía
depresiones, por que me asustaba tanto vivir de esa manera. En que estaba mal, por que me sentía diferente a los demás, que es lo que atacaba tanto mi auto-estima, algo que me ponía en desventaja con la sociedad... qué era eso?
Era un monstruo que me rodeaba, eran sombras negras que me querían
devorar.... se llama vida homosexual .

CONTINUARÉ...

Posted by nohequ :: 7:46 p. m. :: 1 COMENTARIOS:

escribeme algo... anda di que si

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