SÓLO PINCHES 9 MINUTOS

Me quedan sólo 8 minutos para escribir todo lo que ha pasado esta semana. Para más o menos resumir el viernes quiero decir ayer, pase a la casa de mi querido amigo 101. Cogí un colectivo que no me sirvio para nada. Me dejo relejos. Me arregle, me perfume, me prepare sicologicamente y fui.

Llegué y que sorpresa: no estaba. Me dio tanto malgenio que me dije para mi mismo que si me había dejado nuevamente plantado como lo había ya hecho en una ocasión no le iba a volver a hablar. No me gusta sentirme burlado y eso lo hubiera sido para mí.

Le timbre al fijo y no estaba y preciso se me habían acabado los minutos del celular, así que tuve que buscar una cabina y llamarlo. A los 5 minutos llego mientras escuchaba Cali Pachanguero de Niche.

Hablamos un tanto recelosos y lo llamaron justo cuando esperaba que pasara algo que tal vez ya ni pase. Fue se encontro con la expareja y le comente de esta bitacora. Tal vez la haya leido ayer, como tal vez no. Puede que lo tenga presente o puede que se le olvide.

No puedo negar que me asusta que lea todo lo que he escrito y quisiera que tal vez se arrepienta y no lo termine leyendo o que se le olvide o le de mamera ir y leer mis historias. Es complicado, pero de todos modos él es un personaje especial que conoci este año y del cual hablare en un artículo sólo dedicado a él.

Quise tocarlo como en los viejos tiempos... querìa que hubiera sido atrevido y me hubiera besado y me hubiera quitado estas ganas tan tenaces de intimar de verdad con un hombre, pero luego de escucharlo de que no es tiempo para tener sexo, me di cuenta de lo peculiar que tal vez soy. ¿Porqué él si puede no querer tener sexo y yo porque no?... Quise tocarlo y me prepare para nada... pero entiendo que es lo mejor.

Le hablé acerca de lo que había llegado a sentir por él y como me había dolido que me hubiera dejado de hablar a raíz de que se había cuadrado con este cuate. Me dijo que él no pensaba que yo sintiera eso por él y que si me le hubiera adelantado a su previa pareja hubiera tenido un cuento conmigo.

Me quería quedar pero tenía que irme, además de que me había puesto melancolico y me conozco como me comporto ante esas situaciones. Llegué al trabajo y sorpresa, no nos tocaba trabajar.

He pensado mucho en lo de ayer y creo que muchas cosas se me revolvieron pero trataré de asimilarlas de la mejor manera posible.

Mi vida como gay creo que no sería tan difícil si hubiera sabido manejar de manera adecuada mi sexualidad. Soy una persona muy sexual y eso en ciertas ocasiones es dañino además de peligroso para el cuerpo.

Por eso ayer le pedí a Dios que sacará de mi todo deseo sexual. Como no me toco trabajar entre al chat y estaba 116. Espere a ver si me saludaba y no lo hizo. Lo saludé y hablamos un rato. Lo noto cada vez más distante... dijo que depronto hoy nos veíamos. Vamos a ver si eso pasa.